En el #Proyecto LDO estamos en periodo de preparación, en esas semanas tan necesarias para atacar el final de temporada y el verano, cargados con todas las vitaminas do-re-mi-fa-SOL posibles.
La mayor parte del público que asiste a un concierto es sabedora de la dificultad que conlleva para cualquier agrupación decidir un programa, hacerse con las partituras, hacer ensayos parciales (por voces) y totales, lo que implica en muchos casos conciliar con la vida familiar o de pareja, preparar el atuendo y, a veces, viajar hasta el lugar, no siempre pernoctando en casa y a veces sumando muchas horas de autobús.
Añadamos a eso la característica más sorprendente de este coro tan laureado en todo el mundo, el amateurismo.
¿Y eso qué significa? Pues no solo significa que esta buena gente hace todo lo anterior por amor al cante, sino que, además, tienen que compaginarlo con las agendas laborales, y no siempre es posible.
Damos las gracias desde aquí a todas las empresas o profesionales independientes para los que trabajan las y los integrantes de los coros del #ProyectoLDO, al profesorado de quienes aún están estudiando y al alumnado de quienes ejercen la educación, por permitirnos hacer esto que tanto nos gusta, cantar, y contribuir así al enriquecimiento personal que conlleva.
Sin el talante conciliador de esas empresas, profesionales, profesorado y alumnado no nos sería posible seguir siendo uno de los mejores coros del mundo, y además, amateur.